Un grave problema de seguridad en nuestras carreteras hoy en día, es la gran cantidad de personas que están manejando sus vehículos de manera distraída. Solo en los Estados Unidos, hubo más de 3,000 muertes, atribuidas a la conducción distraída, en 2020. De hecho, se ha convertido en un problema tal, que muchos estados han aprobado leyes que prohíben el uso de dispositivos portátiles mientras se conduce. A pesar de los esfuerzos de las autoridades, las personas aún encuentran formas de enviar mensajes de texto y conducir al mismo tiempo. Uno de los métodos más nuevos es el uso de tecnología activada por voz, integrada en algunos vehículos más modernos. Algunos entienden que dictar un texto, en lugar de digitarlo, es una acción más segura.
¿Qué es Realmente la Conducción Distraída?
Cualquier actividad que desvíe la atención del conductor de la carretera contribuye a la conducción distraída. Por ejemplo, hablar por teléfono, enviar mensajes de texto, comer, beber, verse al espejo o mirar hacia un niño en el asiento trasero. Hay tres tipos principales de distracciones al conducir: las distracciones visuales, las distracciones manuales y las distracciones cognitivas.
Las distracciones visuales implican no mirar al camino por delante. Algunos ejemplos incluyen: mirar un dispositivo GPS, leer un mapa o comer mientras se está al volante. Las distracciones manuales implican quitar las manos del volante. Algunos ejemplos incluyen buscar a tientas algo que cayo al suelo del vehículo, cambiar de emisoras en la radio o peinarse mientras se conduce.
Las distracciones cognitivas implican pensar en otras cosas en lugar de prestar atención a conducir. Esto puede suceder cuando la mente está en otro lugar, o se está soñando despierto, o mientras se conversa amenamente con los pasajeros. Esto también puede suceder cuando se usa tecnología activada por voz, como un sistema GPS o el altavoz de un teléfono inteligente.
La Tecnología de Comando de Voz no es Más Segura
Un estudio reciente realizado por el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT por sus siglas en inglés) encontró que las tecnologías activadas por voz no son necesariamente más seguras, cuando de conducción distraída se trata. El estudio, que se publicó en la revista Nature Human Behavior, analizó cómo los diferentes tipos de distracciones afectan el rendimiento del conductor.
Cualquier Distracción Perjudica la Seguridad en un Vehículo
Los investigadores encontraron que todas las formas de distracción pueden afectar, significativamente, la capacidad del conductor para operar un vehículo de manera segura. Esto es especialmente cierto para las actividades que requieren mucha concentración mental, como por ejemplo redactar un correo electrónico o un mensaje de texto. Es bien sabido que se nos hace difícil resistir la tentación de revisar nuestros teléfonos mientras estamos detrás del volante, pero es importante recordar que incluso una distracción de una fracción de segundo puede tener consecuencias desastrosas para nosotros y/u otras personas.
Hablar es una Distracción, Aunque Usted no lo Crea
Curiosamente, el estudio del Instituto Tecnológico de Massachusetts también encontró que los dispositivos de manos libres no son necesariamente más seguros, como la gran mayoría de la gente suele pensar. Esto se debe a que el acto de hablar en sí mismo puede ser una distracción, incluso si tiene las manos libres para operar el vehículo. Una conversación ocupa la mente y la distrae.
El autor principal del estudio, Bryan Reimer, dijo que los hallazgos sugieren que debemos tener cuidado con la forma en que usamos las tecnologías activadas por voz mientras conducimos. “La voz no es una panacea”, dijo. “Los dispositivos de manos libres no van a hacer que el problema de la conducción distraída desaparezca mágicamente”. Reimer agregó que la mejor manera de evitar la conducción distraída es simplemente guardar el teléfono, y dejarlo fuera del alcance mientras se está detrás del volante. Si usted debe usar el teléfono, estacionese primero en un lugar seguro. Los hallazgos de este estudio tienen implicaciones importantes para las políticas públicas y para las medidas de seguridad relacionadas con la conducción distraída. Sugieren que debemos tener cuidado con la forma en que usamos y promovemos las tecnologías activadas por voz en los vehículos. También debemos ser claros acerca de las limitaciones de estas tecnologías y cómo pueden afectar la seguridad del conductor al utilizarlas.
Los Peligros de la Conducción Distraída
Como muestra el estudio del MIT, todas las formas de conducción distraída pueden ser peligrosas. Pero algunas actividades son más peligrosas que otras. Textear mientras se conduce es especialmente peligroso, porque requiere que el conductor aparte la vista de la calle o autopista, quite una o ambas manos del volante, y aparte su mente de la tarea de conducir. Este tipo de multitarea se conoce como cambio de tarea cognitivamente exigente, y puede tener un impacto significativo en el rendimiento del conductor. De hecho, la investigación ha demostrado que enviar mensajes de texto mientras se conduce es más peligroso que conducir bajo la influencia del alcohol.
Las Actividades que le Quiten la Concentración al Conducir lo Ponen en Riesgo
Cuando esté detrás del volante, es importante que preste toda su atención a la tarea de conducir. Eso significa guardar su teléfono y cualquier otra distracción. Y si alguna vez se siente cansado o fatigado mientras conduce, asegúrese de tomar un descanso. No vale la pena poner en riesgo su vida o las vidas de otras personas.
MTI Investiga al Respecto
Esta investigación es esencial porque proporciona información sobre cómo podemos usar y promover estas nuevas tecnologías de una manera que minimice los riesgos de la conducción distraída. También destaca la necesidad de una mayor educación pública, sobre los peligros de conducir distraído y las limitaciones que presenta el uso de las tecnologías activadas por voz.
Dicho estudio se centró en las distracciones cognitivas. Los investigadores realizaron dos experimentos para ver cómo las tecnologías activadas por voz afectan el rendimiento de un conductor. En el primer experimento, se pidió a 48 participantes que condujeran en un simulador mientras completaban varias tareas. Estas tareas incluían hablar por teléfono utilizando el altavoz, escuchar un audio libro, y dictar un correo electrónico. Los investigadores encontraron que las tres tareas distraían a los participantes, los hacían conducir más despacio y cometer más errores.
En el segundo experimento, los investigadores pidieron a 24 participantes que completaran las mismas tareas mientras conducían un automóvil real en una carretera muy transitada. Los hallazgos fueron similares a los del primer experimento, con las tres tareas haciendo que los participantes condujeran más despacio y cometieran más errores. Los investigadores concluyeron que las tecnologías activadas por voz distraen a los conductores y son peligrosas, principalmente cuando se usan para tareas que requieren mucho enfoque cognitivo. Para obtener más información sobre la conducción distraída, visite el sitio web de la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras: www.distraction.gov.
Implicaciones para la Política Pública y las Medidas de Seguridad
Los hallazgos del estudio del MIT sugieren que debemos tener cuidado con la forma en que usamos las tecnologías activadas por voz mientras conducimos. Esto significa que debemos ser conscientes de las posibles distracciones que pueden crear estas tecnologías al operar un vehículo. También debemos ser claros acerca de las limitaciones de estas tecnologías y cómo pueden afectar la seguridad del conductor. Cuando se trata de políticas públicas, debemos tener cuidado de aprobar leyes que permitan el uso de dispositivos de manos libres mientras se conduce. También debemos asegurarnos de educar a las personas sobre los peligros de conducir distraído, y eso incluye, definitivamente, el uso de tecnologías activadas por voz.
