El reciente accidente en una zona de construcción en la autopista I-88, cerca de Afton, Nueva York, demuestra cuán rápido un trayecto normal puede convertirse en un caso legal complicado. En las zonas de obras el tráfico se estrecha, cambian los carriles y se utilizan banderilleros y maquinaria pesada; cualquier error puede causar un siniestro grave.
En estos casos pueden intervenir muchos responsables —el conductor del carro, el transportista, el contratista de obras y hasta el Departamento de Transporte (DOT por sus siglas en inglés). Un abogado con experiencia en accidentes de camiones, carreteras o DOT puede determinar quién tiene la culpa y qué seguro debe pagar.
La responsabilidad se basa en la negligencia, es decir, en no actuar con el cuidado razonable. Conducir demasiado rápido, distraerse con el teléfono, no respetar a los banderilleros o no mantener la distancia son ejemplos típicos. Todos los conductores en Nueva York deben ajustar su conducción a las condiciones de la obra. Si un carro choca por detrás al reducirse el carril, o un camión se sale del paso porque su conductor estaba fatigado, puede considerarse culpa del conductor o de su empresa.
Pero la culpa no siempre recae solo en los conductores. Los contratistas y las agencias públicas deben diseñar y mantener zonas de trabajo seguras. Señales mal colocadas, iluminación insuficiente o una reducción de velocidad mal indicada pueden generar responsabilidad del contratista o incluso del DOT. Demandar a una agencia pública requiere un aviso formal dentro de un plazo muy corto, por lo que actuar rápido es fundamental.
En Nueva York rige el sistema de culpa compartida: el jurado puede asignar un porcentaje de responsabilidad a cada parte. Por eso la recolección de pruebas —fotos, grabaciones, datos electrónicos y registros de obra— es clave.
En materia de seguros, el sistema no-fault (Sin-Culpa) cubre gastos médicos y parte de los salarios sin importar quién tuvo la culpa, pero si las lesiones son graves se puede reclamar contra el seguro de responsabilidad del conductor culpable y, si es insuficiente, contra la propia cobertura de motorista subasegurado. En los casos de camiones, las pólizas comerciales tienen límites mucho más altos y pueden implicar también a las empresas transportistas por mala supervisión o contratación.
Cuando el accidente ocurre en un proyecto del DOT, los contratistas suelen tener pólizas que incluyen a la agencia pública como asegurada adicional.
Las reclamaciones deben presentarse rápido y cumplir con requisitos especiales.
Si tú o un ser querido resultaron lesionados en el accidente de la I-88 en Afton, contactar de inmediato a un abogado especializado en accidentes de tráfico o de construcción puede marcar la diferencia. Un análisis legal oportuno preservará las pruebas, protegerá tus derechos y te ayudará a obtener la máxima compensación posible.
Llámanos las 24 horas del día, los 7 días de la semana, o contáctanos a través de nuestro sitio web o chat en vivo para hablar directamente con un abogado experimentado de The Platta Law Firm. Luchamos por las víctimas de accidentes en todo Nueva York y te ayudaremos a obtener la justicia y la compensación que mereces.